Esto es algo que debe pasarnos a muchos de nosotros. Que un día se nos ocurre una idea que en nuestro fuero interno sabemos que es buena para contar un relato. Sin embargo, por falta de entusiasmo, proyección o pereza los dejamos morir en el olvido o por qué no, los elaboramos durante un tiempo hasta encajonarlos con esa falsa esperanza de "terminarlo" algún día. Esto es algo que me pasó cientos de veces, lo suficiente como para llegar incluso a hallar un patrón en este proceso (por ejemplo, que el entusiasmo en cuestión es una cuenta regresiva, inexorable y fatal que dura al menos 2 semanas).
Consciente de esto, de que me gustan los conceptos pero no ahondarlas en algo tangible y prolongado es que decido liberarlas como lo que son; apuntes, ideas. Algo suelto.
Así que ya saben, pueden leerlo y siquieren tomarlo de base para elaborar su propia historia, puesto que probablemente nunca lo haré. Sin más preámbulos, eh aquí el texto:
"Reencarnaré en el Infierno"
Concepto:
"Cuando mueres no tienes carne ni sangre. Por lo tanto no puedes ser torturado. Si dios reconstruyese tu carne para ser torturada, esta eventualmente sería destruída, por lo cual no serías inmortal ni indestructible. Si reconstruyese tu carne para ser torturado indefinidamente, eso implicaría que dios es una entidad perversa con intención de causar sufrimiento perpetuo. Eso es aberrante. Por ende, no existe este concepto del infierno, y sólo podría existir en caso de que dios sea diabólico."
Esta es a la conclusión a la que llegan dos jóvenes amigos. Por esto que consideran una injusticia es que llevan a cabo un ambicioso proyecto, tan grande como aparentemente imposible de llevar a cabo; convertir al infierno en un buen lugar para existir. Una labor que por si mismo suena absurda. Sin embargo, ambos sienten lo mismo en su interior; les resulta aberrante concebir un paraíso de absoluta paz por un lado mientras que al mismo tiempo exista un campo de perpetuo horror y tortura. Por ello es que convertirán al infierno en un lugar digno. El tema en cuestión será... Cómo. Cómo hacerlo.
Ambos pactan un trato; los dos vivirán según los conceptos y preceptos de absoluta fidelidad a la fe que profesan, de manera tal que les acerque lo más posible a sus terrenales posibilidades el ser dignos de perdurar en el paraíso. Sin embargo... luego de que uno de ellos muera, el otro debería suicidarse, para así ganarse un inequívoco destino en el infierno.
Se trata de una apuesta absurda; ninguno de ellos tiene certeza de si hay existencia después de la muerte. De si en lugar de haber reencarnación hay paraíso, infierno o nada. Además, en caso de efectivamente ser uno destinado al paraíso y el otro al infierno, nunca sabrían de forma anticipada si serán mandados a dos destinos de separación imposible, en qué condición, si habrá chances de comunicarse en la eternidad que habría por delante... pero aun así lo harían. En sus corazones había una fe inquebrantable, y fuese cual fuese el resultado.
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Esa es la base inicial del relato, que incluso tal y como está serviría escuetamente para dar lugar a un debate, para replantearnos a nosotros mismos. Desconozco incluso si el mismo tal y como está es lo suficientemente rico para abarcar en su haber sólo los eventos narrados hasta ahora, o sino en cambio, ahondar en la naturaleza del paraíso y del infierno, dando lugar posiblemente al siguiente final y giro argumental;
Que la tierra en que vivimos sea al final de todo el punto intermedio entre el paraíso y el infierno concebido por ellos, un mundo donde sean mandadas las personas que no acepten las normas de Dios pero que no hayan cometido crímenes de homicidio y tortura.
En fin, espero poder aportar más ideas de ves en cuando, y estaré alegre si algún día por algún azar de esta vida termina influenciando a alguien.
Saludos.
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