
Primero, fueron los periodistas los que inventaron el término de "La Máquina de Diós".
Si si, no lo llamaron "La Máquina de los agujeros negros" ni "La Máquina del inicio del universo" (que aunque no sean válidos, siguen siendo más acertados) no, se fueron a meter púa.
Incluso después entrevistan a un científico diciendo "Y qué piensa usted de la máquina de diós?" y el científico le corrige "disculpeme, pero no, no es la máquina de diós" a lo que luego, el periodista en su artículo, remata con "La ciencia niega a diós" ¿¿¿¿¿¿¿???????
No pará, o sea que si por ejemplo, a mi se me ocurre decir que el periodismo también puede ser denominado como "Monopolio de la Información" y luego entrevisto a un periodista diciendole "¿Cómo se siente usted de trabajar en el monopolio de la información?" y este me responde "No no no. Yo no trabajo en ningún monopolio" A lo que yo luego remate en un artículo afirmando "El Monopolio de la Información es mentiroso".
Quizás sea confuso, pero es lo mejor que pude describir (si tenés un ejemplo más claro, te invito a aportalo)
Pero al fin y al cabo, no podemos odiarlos por lo que hacen; el mundo es un lugar hostil y gracias a ellos, ahora casi nadie le presta importancia a la información científica de no ser que esta se anuncie con títulos pretenciosos y polémicos. Son como las prostitutas; tienen que sugerir cierto morbo para resultar atractivos.

¿Que meto a todos en la misma bolsa? ¿Que cito cuestiones con arbitrariedad? si, jaja, qué hijo de puta. Quizás llegue a ser un buen periodista....
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